En un futuro próximo, se ofrece a presidiarios la oportunidad de someterse a experimentos médicos para acortar su sentencia. Uno de los sujetos, inyectado con una droga que genera sentimientos de amor, empieza a cuestionar sus emociones.
Krosinski es de esos directores que dan una de cal y otra de arena. Tiene una filmografía que, si analizas, ya le gustaría a muchos tener pero que, si miras en detalle, se la pueden encontrar pegas: ‘Oblivion’ no está mal, ‘Tron Legacy’ no hay por dónde cogerla… y todo esto a falta de ver ‘Top Gun: Maverick’. Esta ‘Spiderhead’ se puede incluir bien en sus anteriores trabajos, no siendo nada del otro jueves ni encontrando, tampoco, cosas muy reseñables. Cuenta con actores de talla, capaces de hacer que quieras verla de inmediato, un argumento bastante interesante y una factura que te permite hacer soñar con algo mejor pero, termina siendo una oportunidad fallida.
Siendo sinceros, ‘Spiderhead’ es un thriller de lo más normal, incluso algo simple, que parte de una premisa estimulante pero que su director diluye en exceso con un montaje que se hace, a ratos plomizo. Encima tampoco es que sea excesivamente larga, por lo que podrían haber incluido alguna pequeña subtrama o haber jugado más con la principal porque, creo, daba para ello. Es decir, la falta chicha.
La pareja Teller & Hemsworth no funciona mal llevando la función y, en el caso del segundo, de un tiempo a esta parte se nota que está creciendo como actor y ganando en carisma. No es que haga el papel de su vida aquí, pero si que se nota que no hay color entre el primer ‘Thor’ y esta.
Coloridos y paradisíacos paisajes la adornan hacia su más que predecible final. ‘Spiderhead’ es de esas películas que puedes ver tirado en el sofá, que te entretienen la tarde del domingo y que, probablemente, habrás borrado al cabo de dos fines de semana.
El Alquimista Cinéfilo 