Cuando el multimillonario Miles Bron invita a algunos de sus allegados a una escapada a su isla griega privada, pronto queda claro que no todo es perfecto en el paraíso. Y cuando alguien aparece muerto, ¿Quién mejor que Benoit Blanc para desentrañar todas las capas del misterio?
Aunque suena a trabajo fácil hacer una secuela, en los tiempos que corren es algo más complicado de lo que parece. Tienes que mantener la esencia de la original y, si puedes, meter algún guiño que la haga crear su propio universo. No te olvides, además, que el público a estas alturas se las sabe todas y sorprenderle va a ser un trabajo de chinos.
Pues bien, tras el éxito de la original y el desembarco de dinero por parte de Netflix para crear una saga alrededor del personaje, Johnson te invita a una paradisíaca isla griega para desenmarañar el misterio de Glass Onion, rodeado de personajes indeseables, de esos de «por el interés te quiero Andrés» y con la estimable presencia del avispado detective Benoit Blanc. Y, tras su primer visionado, veo que todas las piezas me encajan y la disfruto, aunque no esté al nivel de la primera.
Johnson hace un trabajo estimable por conseguir hacer algo diferente pero que nos recuerde a ‘Puñales por la espalda’, y lo consigue. Primero porque el emplazamiento elegido da lugar a muchos juegos de espejos, sombras, pasadizos y un largo etc que el director aprovecha, bebiendo de los grandes de la novela negra.
Segundo porque vuelve a conseguir un reparto heterogéneo y muy válido, cada uno con su respectivo personaje y los motivos que tendrían para llevar a cabo un asesinato. Recupera a algunos actores a los que habíamos perdido la pista (Kate Hudson), otros que empiezan a pillarle el tranquillo aunque esto no era lo suyo (Bautista) y otros que siempre serán unos fueras de serie (Norton). Ojito al par de cameos que cuela Johnson sin avisar y que saben la mar de bien.
Tercero, y último, porque Daniel Craig, un poquito menos gordito que en la original, vuelve a conseguir exprimir su personaje al máximo para que salgamos encantados. Insisto en que Blanc va camino de ser, si esta tiene éxito, uno de los grandes detectives del séptimo arte.
Creo firmemente en que, si os gustó la original, quedaréis encantados con esta. Ojalá ver más aventuras de Benoit Blanc en la pequeña o en la gran pantalla.
El Alquimista Cinéfilo 
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