La Calle del Terror Parte 1 – 1994: Más inventos como este

En 1994, un grupo de adolescentes descubre que los sucesos que aterrorizan su ciudad desde hace generaciones podrían estar conectados. Además, puede que ahora les toque a ellos protagonizar la pesadilla.

Para alguien como yo, al que la lectura de pequeño siempre le costaba, encontrarme con R. L. Stine fue una grandísima suerte. Sus libros de ‘Pesadillas’ fueron el verdadero origen de que la palabra escrita me empezase a interesar así que saber que es él quien está detrás de las novelas en las que se basa la trilogía me hizo rápidamente interesarme en el proyecto.

Lo cierto es que este tipo de eventos, a mitad de verano, tres películas de una trilogía estrenadas cada fin de semana por Netflix deben ser más aplaudidos. Sinceramente, me lo he pasado muy bien con esta primera entrega, que debe sentar las bases y la historia de lo que debe ser finalmente la saga. ‘La Calle del Terror Parte 1: 1994’ es un slasher disfrutable y entretenido, con sus dosis de sangre y una banda sonora capaz de transportarte a la época. Si queréis una referencia más concreta de lo que os podéis encontrar, me iría directamente a algo tipo ‘Grindhouse’.

Viajamos hasta 1994, hasta el pequeño pueblo de Shadyside que, como buen pueblo de los Estados Unidos que se precie, tiene una historia repleta de asesinos en serie y sucesos trágicos que han marcado para siempre a los habitantes de la localidad. Ajenos a todo eso, un grupo de jóvenes se da de bruces con la historia de una antigua bruja que hará pasar un muy mal rato a los allí presentes.

Gracias a un buen estudiado uso del tempo, la historia va in crescendo poco a poco. Desde la secuencia inicial con Maya Hawke hasta el desarrollo de los acontecimientos, el espectador tiene el tiempo suficiente para aclimatarse al lugar y a lo que va a suceder. Así, a diferencia de otras películas, los responsables consiguen que me caigan bien los protagonistas (logro realmente difícil) y que sufra un poquito cuando pasan las de caín.

Con las bases asentadas y a pesar de no inventar nada nuevo, ‘La Calle del Terror Parte 1: 1994’ ha conseguido su propósito, olvidarme del calor veraniego y prestar atención a la pantalla. Me intriga saber cómo continuará la historia.